Dublín, la ciudad de las mil puertas de colores

Las puertas de colores en Dublín dan mucho de qué hablar. Y aunque, querido amigo viajero se te ocurra pensar que se trata más de un rasgo más del humor y simpatía de los irlandeses, lo cierto es que esta costumbre  tiene su origen en varias leyendas.

Una de ellas se remonta a tiempos en que Irlanda formaba parte del Imperio británico. Se cuenta que fue un acto de rebeldía contra la reina Victoria, que tras quedarse viuda, mandó pintar todas las puertas de negro en hogares de Reino Unido en señal de luto. Sin embargo, los irlandeses, que nunca habían simpatizado con la monarquía, optaron por pintar de llamativos colores las puertas de sus casas mientras que el resto de Reino Unido guardaba luto con sus puertas negras.

Otra leyenda irlandesa –con menos credibilidad– cuenta que una persona tras haber consumido varias pintas después del trabajo, encontró a su esposa con otro hombre en la cama cuando entró en su casa y los mató. A la mañana siguiente, se dio cuenta de que sus víctimas habían sido en realidad sus vecinos. Según este espantoso suceso, para evitar tales confusiones decidieron pintar cada uno su puerta de un color, y además que este fuera lo más llamativo posible. ¿Qué leyenda te parece más creíble?