DESCUBRE IRLANDA CON LAS MEJORES EXPERIENCIAS

El poeta William Drennan bautizó Irlanda como la Isla Esmeralda en el XVIII. Desde entonces, visitantes de los cinco continentes no han parado de reafirmarlo. Puede presumir de un legado único, ya que por sus venas corre sangre vikinga y gaélica, que son las claves de su distintiva personalidad. Por si esto fuera poco, cuenta con dos corazones que comparten la belleza de impactantes acantilados, legendarios castillos, infinitas costas e idílicos paisajes de intenso verdor; sin olvidar su cara urbana, que dispone de coquetas poblaciones e importantes ciudades, como Dublín y Belfast. Separados por los colores de una bandera, ambas partes luchan por superar las diferencias y comparten un importante valor: la omnipresente amabilidad de los irlandeses. Haz la prueba, viajero, y frecuenta uno de los miles de pubs que saben a cerveza y a tradición. ¿Cuánto tiempo crees que pasará sin que entables conversación con algún local? Te garantizamos que no llegará a la segunda pinta.

PARA LOS VIAJEROS MÁS CURIOSOS

Resulta cuanto menos interesante que Irlanda, un país de reducida población -hoy en día, 4,7 millones en la República de Irlanda- haya dado al mundo un volumen tan importante de notables escritores, como bien habrán podido reconocer los lectores acérrimos. James Joyce, Oscar Wilde, Bram Stocker, Bernard Shaw, Jonathan Swift son solo algunos de las grandes plumas que se vieron inspirados por estos paisajes únicos. Llévate papel y boli, quién sabe… Quizá las musas también vayan a tu encuentro durante tu viaje a la isla esmeralda.

SALUD

Viajero, no tienes por qué preocuparte, ya que es un país muy seguro y no necesitas ninguna vacuna específica. El país está perfectamente dotado de farmacias y centros de salud. Como siempre, si quieres viajar más tranquilo, puedes contratar un seguro privado. Como ciudadanos de la UE, con la Tarjeta Sanitaria Europea que se obtiene en el país de origen, siempre serás atendido en caso de necesidad. Si tienes que abonar por adelantado algún tratamiento médico, conserva toda la documentación y facturas originales para solicitar el reembolso. Si tienes que ir al hospital, acude siempre con el pasaporte, la Tarjeta Sanitaria Europea (TSE) y las tarjetas de crédito. Para más información, ponte en contacto con los servicios de la Seguridad Social o seguro médico privado en el país de origen.